+ Necesidades naturales, deseo de vida
– frustración, desbordamiento
El hambre es evidente en los sueños. Tiene que ver con una necesidad, un apetito natural. Normalmente, anhelamos el conocimiento, lo que corresponde al impulso epistemológico en la teoría freudiana. Por lo tanto, a menudo es el alimento intelectual o el alimento espiritual lo que necesitamos desesperadamente.
A pesar de nuestra desenfrenada absorción de diversos manjares, el significado de los sueños es negativo cuando todavía tenemos hambre. Aquí se simboliza el deseo insaciable. Es el id, un impulso insaciable, desenfrenado, el id de un gran bebé hambriento. Es la falta de un marco, o la persistencia de marcos anárquicos de la infancia, lo que deja a los adultos en un estado de «insatisfacción» y dependencia. Un superyó mal construido no puede controlar los antiguos impulsos del ello.
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